En estos días de exceso de turrones, polvorones y demás dulces navideños. Esta receta me ha parecido muy fácil e ideal, para rellenar nuestro surtido navideño con algo diferente a lo que se ofrece habitualmente, cuando tienes visitas estos días y sacas la bandeja con los dulces típicos.
El truco para que quede la receta estupenda, es hacerla con mantequilla blanda, a punto pomada y que sea de buena calidad. Yo para este tipo de recetas, que incluyen mantequilla, prefiero hacerla en casa con la Thermomix montando la nata del 35% (normalmente utilizo nata de la marca «La Asturiana») hasta que se hace mantequilla: ésta es la receta.
De tal forma que directamente, cuando ya tengo la mantequilla hecha no la meto en el frigorífico la dejo a temperatura ambiente un buen rato, hasta que esté a punto pomada y procedo con la receta que la contenga.
La mantequilla casera, no lleva ningún tipo de colorantes ni aditivos, por eso hay que consumirla cuanto antes, o como mucho dejarla una semana en el frigorífico, no más. Si no la consumís podéis congelarla en un recipiente de cristal, durante 2 meses, y se mantendrá cuando la saquemos para consumirla, con idénticas cualidades.
También podéis congelarla en cubiteras de silicona como la foto.
Fuente: Recetas Ana Alvarez