– 1 pechuga de pollo
– 1 zanahoria
– 1 cebolla
– un puñado de guisantes
– 2 tomates cherry
– 1 pimiento del piquillo
– 2 rodajas de piña
– 100 ml. de vino blanco
– 100 ml. de nata líquida (o leche de coco, si le queremos dar un toque más exótico) o 1 yogur griego
– aceite de oliva virgen
– sal y pimienta
– 1 cucharada escasa de curry (dulce o picante)
Si utilizamos los restos de un pollo asado, lo desmenuzamos o cortamos en daditos la carne.
Cubrimos el fondo de una sartén con aceite de oliva y ponemos a fuego medio-fuerte.
Doramos el pollo (si lo tenemos crudo)y añadimos las verduras que querramos añadir (excepto el piquillo y los guisantes).
Dejamos que se cocine todo un poco y añadimos el vino, el curry, la sal, la pimienta y removemos (en este momento añadiríamos el pollo desmenuzado si lo utilizásemos cocinado).
Añadimos la nata junto con los guisantes, el piquillo y la piña picados.
Dejamos reducir hasta que la salsita espese y listo para servir!
Este plato queda genial presentado con arroz blanco como guarnición.
Fuente: María’s Recipe Book