Gracias a una de mis clientas (Carol) conocí esta receta, las probé en su casa y me encantaron. En la fotocopia que ella me dió pone la fuente de donde la sacó i-recetas, así que gracias por compartir esta delicia….. Son como pastas de té, con un saborcito a mantequilla divino…..
Por cierto he de añadir que crecen mucho en el horno y que las pongáis separaditas en la bandeja porque a mí se me juntaron todas y bueno….. las separé como pude, así que en vez redonditas se me quedaron medio rectangulares…..Os pongo la receta original y mi adaptación a la thermomix.
Ingredientes
250 gr. de mantequilla con sal (puede emplearse sin sal y añadir una pizca a la harina).
190 gr. de azúcar polvo (a mí se me olvidó y puse ázucar normal y quedó bien)
8 gr. de azúcar vainillado
4 yemas de huevo
385 gr. de harina normal
12 gr. de levadura Royal
Elaboración:
1) Batid la mantequilla con una cuchara de madera o espátula hasta que esté reblandecida. Añadid los azúcares y seguir batiendo hasta conseguir una pasta cremosa.
2) Tamizamos la harina con la levadura. Añadimos a la mantequilla las yemas y la mezcla de la harina. Mezclamos pero sin trabajar demasiado.
3) Formamos una bola, la envolvemos en un film de cocina y la llevamos al frigorífico durante una media hora, hasta conseguir la consistencia que permita formar un cilindro. Pasado ese tiempo, retiramos la masa de la nevera y formamos dos cilindros de unos 4 cm. de espesor (yo hice un sólo cilindro más grande), los envolvemos en plástico y los llevamos a la nevera un mínimo de una hora. Podría estar de un día para otro. (yo lo metí un poco en el congelador hasta que ví que se podían empezar a cortar).
4) Precalentamos el horno a 170º C. Retiramos los cilindros de la nevera y cortamos formando galletas de un centímetro de espesor, aproximadamente. Ponemos sobre papel de hornear y cocinamos durante unos 20 minutos, hasta que tengan un tono dorado. Cuanto más doradas, más crujientes y duras. (yo las tuve menos tiempo creo que fueron 15 minutos, no llegué a dejarlas que se pusieran doradas).
Fuente: Las recetas de Pipi
