Intentamos elegir patatas del mismo tamaño, para que se hagan todas por igual.
Lavamos muy bien las patatas, las secamos con un paño y dejamos que reposen hasta que estén totalmente secas.
Precalentamos el horno al máximo.
Pinchamos las patatas por varios sitios con un tenedor, vertemos un poco de aceite sobre la piel y frotamos toda la patata. A continuación también la frotamos con un poco de sal gorda. De esta manera quedará más crujiente.
Metemos en el horno a temperatura de 220° durante 90 minutos o más, hasta que estén tiernas.
Cortamos las patatas sin partirlas del todo y sacamos la mayor parte de la patata, dejando las pieles con una fina capa de carne. Machacamos bien lo que se ha sacado de la patata y añadimos los ingredientes elegidos (mantequilla, queso, un poco de guindilla molida, sal, pimenta…)
Rellenamos las pieles de patata con la mezcla obtenida y gratinamos al grill. Servimos inmediatamente.
Algunas ideas:
– con queso azul La Peral
– sal y mantequilla
– ajo en polvo y aceite de oliva
– queso crema y jamón cocido
– queso crema y salmón ahumado
– cheddar y bacon
– bonito en aceite, huevo duro y mahonesa
– tomate, jamón curado y aceite de oliva
– salsa boloñesa y queso rallado
– etc.
Fuente: María’s Recipe Book