Una receta muy sencilla para los amantes del chocolate. Podemos utilizar moldes de muffins, individuales de silicona o cápsulas de papel.
Fuente: El Rincón de Bea
– 280 gr. de harina de repostería
– 175 gr. de azúcar moreno
– ½ cucharadita de levadura en polvo (tipo Royal)
– ½ cucharadita de bicarbonato
– 5 cucharadas de cacao puro en polvo (sin azúcar)
– 170 ml. de leche entera
– 150 gr. de mantequilla derretida
– 2 huevos
*Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente.
Precalentamos el horno a 200º.
Si utilizamos un molde especial para muffins, lo engrasamos con la ayuda de un pincel, o con los dedos. Si utilizamos cápsulas de papel, no hace falta.
Mezclamos en un bol los ingredientes secos (harina, azúcar, levadura y cacao) y reservamos.
En otro bol mezclamos bien los ingredientes húmedos.
Añadimos los ingredientes húmedos sobre los secos e integrarmos rápidamente con movimientos envolventes (un máximo de 10-15 movimientos). No importa si nos queda algo de harina a la vista, desaparecerá durante el horneado.
Vertemos la masa con cuidado en los moldes o cápsulas, llenando sólo ¾ de su capacidad.
Introducimos los muffins en el horno y los cocemos de 15 a 20 minutos aproximadamente, o hasta que al pincharlos con un palillo éste salga limpio.
Sacamos los muffins del horno y dejamos que enfríen para degustarlos, aunque templaditos están buenísimos.
Si utilizásemos molde, los dejaríamos reposar durante 5 minutos, luego desmoldaríamos y terminaríamos de enfriar sobre una rejilla.
Fuente: María’s Recipe Book