En esta receta no pongo cantidades de las verduras, ya que utilizaremos las que tengamos en la nevera o nuestras favoritas. Esta preparación es para 2 personas.
– 200 gr. de arroz de tipo arborio (especial risotto)
– 4 cucharadas de aceite de oliva, por supuesto
– pimiento (rojo, amarillo…)
– judías verdes
– berenjena
– cebolla
– 1 sobrecito de azafrán (en hebras o en polvo)
– 1 vasito de vino blanco
– 800 ml. de caldo de jamón, pollo, o agua (4 medidas del volumen de arroz)
– 2 cucharadas de queso rallado (tipo pecorino, parmigiano reggiano…)
– 1 nuez de mantequilla
– pimienta negra molida
– sal
Limpiamos y troceamos las verduras. Las doramos con la cebolla en el aceite caliente usando una sartén grande.
Añadimos el arroz y removemos durante 1 minuto. Vertemos el vino blanco y seguimos removiendo. Añadimos el azafrán.
Vamos incorporando el caldo, muy caliente, sin parar de remover, de forma que el arroz no se quede sin caldo ni con exceso de líquido. Lo justo para que no se corte la cocción.
Removemos cada cierto tiempo para que el arroz suelte el almidón.
Cuando se haya absorbido la primera parte del caldo, seguimos incorporando caldo progresivamente y continuamos removiendo.
Tenemos que conseguir una textura cremosa, de arroz al dente. El fuego debe estar a potencia media/alta.
Un par de minutos antes de terminar la cocción incorporamos la mantequilla, el queso rallado, la pimienta y la sal. Removemos y servimos inmediatamente.
Fuente: María’s Recipe Book